Hay cuestiones que son mucho más fáciles de lo que parecen y que nos proporcionan una ventaja que es sustancial en lo que tiene que ver con nuestra calidad de vida. Una de ellas está directamente relacionada con el estado de nuestra salud dental, que siempre ha sido una gran olvidada y que nos permite hacer de nuestra vida algo mucho más cómodo. No valoramos lo bien que nos encontramos cuando no tenemos ningún problema en nuestra boca o cuando no padecemos ningún dolor en dicha zona y solo nos solemos preocupar por ella cuando el dolor ya está con nosotros y nos está fastidiando la vida de una manera bastante importante.
Un dolor de boca o dientes puede hacer que nuestro día sea un auténtico infierno. Teniendo en cuenta que el dolor que sentimos en dicha zona se puede extender a otras zonas del cuerpo como el oído o la cabeza, es evidente que todo lo que tenga que ver con mejorar el estado de nuestra salud dental es necesario y va a jugar un importante papel a lo largo del día a día. Y es clave en todos y cada uno de los momentos de la vida, desde que somos bien pequeños hasta que somos ancianos. No bajar la guardia en ninguno de los momentos que forman parte de la vida va a tener siempre una influencia positiva para el estado de nuestra boca.
La salud bucodental está en peligro en muchos casos, eso es algo que debemos reconocer. En una noticia publicada en la página web de la Organización Mundial de la Salud, se indicaba que dicha entidad estaba alertando del hecho de que la mitad de la población mundial había descuidado la salud bucodental. En concreto, es un 45% de la población mundial, o lo que es lo mismo, unas 3.500 millones de personas, son las que se encuentran sufriendo un problema como del que estamos hablando. Y la verdad es que es una verdadera lástima que así sea, sobre todo por el hecho de que cuidar de la salud dental es tan fácil como cepillarse tres veces al día los dientes y acudir al dentista al menos una vez al año para prevenir la aparición de cualquier problema o dolor.
Hemos querido saber cuál el estado de los dientes de las personas de nuestro país y hemos dado con un estudio realizado por el portal web Statista en el año 2017. Según los datos que se recogen en él, el 78% de la población tiene caries, el problema dental más común que nos podemos encontrar. Además, el 73% de la gente tiene dientes o muelas extraídos, mientras que el 67% tiene dientes o muelas empastados. Más de un 16% sangra cuando se cepilla y a un 5% se le mueve alguna pieza dental. Como dato final, destacaremos que solo algo más del 26% de la gente conserva por completo sus dientes y muelas naturales, un porcentaje que es mucho más bajo de lo que nos gustaría reconocer.
Conservar una buena salud dental tiene muchas más ventajas además del hecho de evitar los problemas que tienen que ver con los dolores de muelas o dientes. Y es que tener una salud dental bien cuidada también guarda relación con mantener una sonrisa de lo más blanca y bonita. La sonrisa es un arma que todo el mundo tiene posibilidad de desarrollar y que puede hacernos mejorar la imagen que se desprende de nosotros. Se trata de una de las cuestiones en las que más nos fijamos en una persona en el momento en el que la conocemos y es lógico que debamos tener una vigilancia sobre todas y cada una de las cosas que tienen que ver con ella.
Podríamos decir que el cuidado que la sociedad tiene sobre su propia salud dental ha crecido en los últimos años. Hemos querido saber cuales son las razones exactas que han empujado a la gente a ello y desde la clínica dental Navalcarnero, una de las entidades que han hecho posible ese mejor cuidado de la salud dental entre las personas, nos han indicado que la respuesta es una mezcla entre el deseo de evitar dolores incómodos de dientes y muelas y la necesidad de potenciar nuestra imagen física, algo que cada vez demanda en mayor medida la sociedad en la que nos encontramos.
Los niños se toman en serio este tema
Uno de los grupos de población que más en serio se están tomando un asunto como del que estamos hablando es el de los niños y niñas, que son conscientes de la importancia que tiene el hecho de mantener un control sobre el estado en el que se encuentran sus dientes y saben de sobra lo que puede ocurrir si no hacen los deberes en ese sentido. Parece mentira que sean ellos y ellas quienes mejor cuiden de su boca y que las personas adultas tengamos muchos más problemas en ese sentido. Esperamos que esas nuevas generaciones no cambien esos hábitos, porque les van a ayudar a lo largo de toda su vida. Y nos alegramos profundamente de ello.
La verdad es que hay que hacer autocrítica entre la población adulta y ser conscientes de que es necesaria una mejora todavía mucho más grande de la que ya se ha producido en materia del cuidado de nuestra boca. Estar pendientes de esos cepillados diarios y de acudir de vez en cuando al dentista es lo menos que podemos hacer. Y luego no podemos olvidarnos de temas que también tienen una influencia muy grande en un aspecto como la salud dental, temas como pueden serlo la alimentación o la necesidad de reducir o eliminar el consumo de productos como el tabaco, que tan perjudiciales son para todas y cada una de nuestras piezas dentales.
Una inversión de presente y futuro
En una ciencia como la economía, las inversiones que se producen para que nos ofrezcan rentabilidad y beneficios en el presente y futuro son las mejores. Si eso lo aplicamos a la vida rutinaria que mantenemos todos los días, podríamos decir que el cuidado de nuestros dientes es como una de esas inversiones. Nos va a proporcionar una protección que va a mantenerse hoy y que también va a generar un buen estado de la boca de cara al futuro. Por tanto, no debemos pensar demasiado a la hora de agarrar el cepillo y ponerle la pasta de dientes encima para empezar con el proceso de cepillado. Eso no nos va a dar dinero, pero sí salud.
Una de las razones por las cuales los niños y niñas cuidan de una manera muy interesante de su salud dental está relacionada con la educación, un factor sin el cual no se entiende esa conciencia que tiene la gente más joven al respecto del cuidado de su boca. A esos niños y niñas se les ha enseñado a adquirir unos hábitos saludables en relación a sus dientes y muelas, y se les ha enseñado de una manera eficaz, lo que ha hecho posible que ya desde muy pequeños hayan sentido la necesidad de invertir una pequeña parte de su tiempo de cepillar sus dientes e ir generando así una salud dental envidiable y de la que tenemos que tomar nota los y las mayores.
Somos de las personas que consideran que las personas mayores tienen y han tenido siempre una mayor dificultad para cuidar de sus dientes porque cuando eran jóvenes no había una conciencia tan grande al respecto de este tema y porque tampoco existían los medios necesarios para hacerlo. No han adquirido esos hábitos que hoy sí que se está consiguiendo inculcar a la gente joven y, por consiguiente, también es complicado que durante la vida se haya cuidado de manera periódica de los dientes. Sin embargo, creemos que nunca es demasiado tarde para sumarse a este aprendizaje y para cuidar de unos dientes que siguen siendo una parte del cuerpo fundamental para nuestro bienestar por muchos años que tengamos.
Ni que decir tiene que hay que continuar promoviendo todo lo que tenga que ver con la salud dental desde las instituciones públicas y las clínicas dentales. Este debe ser el camino a seguir, la tendencia que nunca podemos dejar de lado y la manera que vamos a tener siempre de conquistar mejoras desde el punto de vista de la salud dental. Tenemos que aprovechar el viento a favor que ha supuesto la pandemia, un momento que ha hecho posible que la gente sea todavía más consciente de lo importante que es el cuidado de la boca.
Ojalá que los resultados de los que dispone un país como el nuestro sean cada vez un poquito mejores. Ese es el objetivo y lo que tenemos que conseguir de cara al futuro para conseguir que la sonrisa de cada persona sea perfecta y que no tengamos que padecer ningún dolor bucal de esos que nos pueden fastidiar perfectamente un día… o varios consecutivos. Nadie merece pasar por eso y la solución está en la responsabilidad de cada cual.