A nadie se le escapa saber la importancia que tienen algunas zonas concretas de nuestro cuerpo a la hora de que se determine si somos guapos, guapas o no. La verdad es que este asunto no solo depende de una cuestión, pero lo cierto es que hay tres o cuatro asuntos que resultan de una necesidad imperiosa si queremos parecer (y ser) guapos o guapas. Uno de esos asuntos es el que tiene que ver con nuestra boca y, más concretamente, con nuestros dientes. Esta es una cuestión ineludible si queremos potenciar nuestra belleza. Y es que la cosa cambia mucho de no tener unos dientes cuidados a sí tenerlos.
La diferencia es sustancial. Imaginaos una sonrisa blanca y bonita y ahora comparadla con una boca a la que le falten dientes, que éstos no sean blancos y que, encima, emita un olor que no sea el que deseamos transmitir a quien tenemos enfrente. La verdad es que no tiene color. Tenemos que evitar la segunda de esas situaciones y no cabe la menor duda que tenemos una buena nómina de actuaciones y posibilidades para operar al respecto. Acudir a un buen odontólogo es la mejor de esas alternativas. Empezar a cuidar de una manera mucho más amplia de nuestros dientes es otra de ellas.
En España no hemos estado demasiado acostumbrados a visitar a nuestro dentista. No lo decimos nosotros, lo han dicho las diferentes estadísticas que han sido realizadas por los profesionales de este campo. El resultado ha sido nefasto. Mucha gente ha visto de esta manera limitada la belleza a la que podría aspirar en caso de que sí cuidara de sus dientes. Parece que, poco a poco, empezamos a darnos cuenta de todas las ventajas que van asociadas a ese cuidado. Pero todavía tenemos muchos pasos que dar para mejorar este asunto.
Uno de los motivos principales por los cuales la gente está empezando a acudir al dentista con una mayor asiduidad es la de potenciar su belleza. Los dientes y la sonrisa son armas fundamentales para ello y todos lo sabemos. Por eso la mayoría de las personas que han decidido empezar a cuidar de sus dientes acude ahora al dentista. Eso es lo que nos han comentado desde CML Odontólogos, una entidad especializada en la resolución de todo tipo de asuntos relacionados con la salud y el cuidado de nuestra boca y dientes.
Dos pájaros de un tiro
Cuidar de nuestros dientes tiene un doble premio que no podemos dejar pasar. Por una parte, hace que mejore nuestra salud, algo que realmente es lo que más importa en términos de calidad de vida sin lugar a dudas. Pero es que, por otra parte, un buen cuidado de nuestros dientes tiene mucho que ver en la consecución de esa belleza que muchos de nosotros y nosotras queremos conseguir. Por eso, el mejor consejo que os podemos dar es el de hacer que nuestros dientes permanezcan bien sanos y cuidados.
En este punto, la verdad es que tenemos bastante margen de mejora. Según un artículo que fue publicado en la página web de Infosalus, el 85% de los ciudadanos de este país manifestaba que tenía al menos un problema de índole bucodental. Es un dato demoledor y que pone de manifiesto que en España hay un problema de cultura dental que es necesario resolver en orden de mejorar esa calidad de vida de la que hemos hablado y también mejorar en lo que tiene que ver con nuestra imagen y estética, dos aspectos clave en lo que respecta a nuestro día a día.
Solo hace falta mencionar los cinco problemas dentales más comunes en un país como el nuestro para darnos cuenta de lo que nos pueden condicionar en nuestra salud y en lo que tiene que ver con nuestra belleza. Estos cinco problemas han sido determinados según una noticia que fue publicada en la página web de la Tribuna del País Vasco.
- La caries es el principal problema bucodental y uno de los que degrada los dientes en mayor medida, con las consecuencias estilísticas que eso lleva asociado.
- La gingivitis afecta a las encías, una zona fundamental para nuestra boca, y hace que en cualquier momento nos podamos encontrar con el sangrado en nuestra boca.
- El bruxismo, o el rechinar de nuestros dientes, tampoco es que ayude demasiado a la hora de hacer que nuestra imagen sea la que debería ser.
- La periodontitis es una fase más desarrollada de la gingivitis. Daña al hueso del diente, que se puede afectado de una manera bastante grave por el sangrado.
- La halitosis o el mal aliento es, desde luego, una de las peores cartas de presentación que podemos dar de nosotros mismos sin importar cuál sea el lugar en el que nos encontremos. Ya sea a nivel de salud o de belleza, la verdad es que esta no es la situación de la que desearíamos ser protagonistas ni mucho menos.